España se enfrenta en las próximas décadas a un gran reto medioambiental que desde bp abordamos con compromisos y esfuerzos reales.
Por eso nuestro modelo de negocio y su transformación ya iniciada están asociadas a mínimos que procuren el furuto de la biodiversidad y sus recursos en la península.
En bp España ya hemos comenzado a analizar y depurar la gestión que hacemos del agua, desarrollando una metodología y un enfoque que pretende mejorar la eficiencia de su consumo.
Estamos ejecutando evaluaciones detalladas en instalaciones seleccionadas para identificar las áreas de mejora sobre las que se irá trabajando a nivel global durante los próximos años. Es algo de lo que Castellón ya se está beneficiando.
Para encontrar esos márgenes de mejora en el consumo de agua, en bp España estamos reconsiderando colaboraciones antiguas y planteando otras nuevas. Queremos medir el impacto de estas decisiones aplicando el balance volumétrico de beneficios del agua (VWB), creado por WRI. Ya hemos revaluado actividades, identificado enclaves operativos estresados y cuencas hidrográficas presionadas, así como consultado con potenciales socios.
La refinería de Castellón consume más de 4.000 m3 de agua al año. Por eso en bp España nos tomamos muy en serio la gestión hidráulica, con programas de prevención, infraestructuras de control y todo tipo de políticas sostenibles.
La última medida de calado ha sido la consolidación del proyecto de utilización de agua osmotizada como agua de reposición en las torres de refrigeración. Solo esto nos permite minimizar la necesidad de purgas y reducir tanto el consumo de agua como la generación de efluente.
bp España lleva varios años trabajando para reducir los desperdicios generados en la refinería de Castellón y desarrollar políticas de circularidad sostenibles en todas las operaciones, con especial énfasis en el crudo.
En 2016 la planta comenzó a procesar aceite de origen bio-renovable junto al propio crudo para producir biocombustibles, y abrió una nueva vía de trabajo para seguir estudiando líneas de negocio en torno al uso de materia renovable y la reducción de la huella de carbono en el ciclo de vida de los materiales.
En los últimos años la refinería de Castellón ha puesto en marcha un plan de minimización de residuos, con el objetivo de reducir los desperdicios derivados de la refinería y, si es posible, potenciar su valorización como materias primas.
En 2020 bp se unió a la aplicación “Too Good To Go” para tratar de reducir los desperdicios de alimentos en las tiendas de las estaciones de servicio distribuidas por toda España. Un propósito en línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12.3.
Este servicio conecta a usuarios con miles de establecimientos que venden su excedente diario de comida a precio reducido, para evitar que se desperdicie. Con la colaboración, 135 de las tiendas de conveniencia de Markoil pasaron a ofrecer este servicio.
No emprendemos nuevas actividades de exploración o producción de petróleo y gas dentro de los límites de los lugares inscritos en el Patrimonio Mundial de la UNESCO; y dentro de los límites de las Reservas Naturales Estrictas o Áreas Silvestres.
Nos comprometemos a lograr un impacto neto positivo (NPI) en la biodiversidad con nuestros nuevos proyectos. Para ello trabajamos y evaluamos la metodología propuesta con Fauna & Flora International (FFI).
Conservaremos y restauraremos la biodiversidad en torno a nuestros principales centros de explotación, así como apoyaremos el uso sostenible de los recursos naturales.